martes, octubre 31, 2006
Doctrina del eterno retorno
Una manera de plantear la doctrina del eterno retorno no como principio metafísico sino como principio moral, esto es, como punto de arranque para la toma de decisiones, como punto de partida para guiar una práctica moral, para determinar y regular nuestra conducta.
Imagina que el universo nunca tuvo un principio ni nunca tendrá un final sino que existió infinitas veces en el pasado y se dará infinitas veces en el futuro. Además, este universo se repite cíclicamente idéntico a sí mismo, siempre termina consumido en un fuego ígneo para después, una vez purificado, reproducirse nuevamente de igual forma. Este mundo siempre se repite igual porque es completamente racional, en él sólo hay necesidad, una suma de causalidades, no hay lugar para la contingencia, para el azar. Además, es el mejor de los mundos posibles porque su racionalidad inmanente es expresión de su divinidad. Este es, sucintamente, el modelo cosmológico de los estoicos.
Ahora llega lo interesante. Inmersos en esta cosmovisión, ¿qué principio moral adoptar?
Hay dos posibilidades:
La primera ve dicho orden como una fatalidad, hagas lo que hagas tu destino se encuentra prefijado, identificado con la providencia divina, atrapado en una sucesión de hechos insoslayable. Por más que quieras, la realidad es la que es, estás atado al transcurrir de los acontecimientos que se repite siempre idéntico, te encuentras en una rueda que gira sin cesar siempre en un sentido bien determinado. Sólo puedes vivir felizmente si vives acorde a la naturaleza, si aceptas su fatalidad, o, caso contrario, puedes rechazar la naturaleza pero verte igualmente arrastrado a disgusto por su devenir.
La segunda posibilidad la desarrolló Crisipo, el estoico de mayor talla intelectual, con vistas a liberar a la moral estoica del pesimismo. El eterno retorno de lo mismo no debe ser visto como una fatalidad sino todo lo contrario. Para Crisipo cada instante reviste del carácter de acontecimiento. En cada instante tenemos la libertad y la gran responsabilidad de decidir el sentido de lo que ya pasó y de lo que ocurrirá por siempre jamás. Crisipo nos dice tomes la decisión que tomes hazlo pensando que ello se repetirá siempre, indefinidamente, por los tiempos de los tiempos, con los ciclos del universo. En esta concepción, pasado y futuro cobran sentido en el presente. El sabio estoico no está paralizado a una imagen del pasado o del futuro, no vive con la mirada puesta en lo ya ocurrido o con la esperanza en un futuro mejor sino que actúa intentando dotar de sentido, en cada instante presente, al pasado y al futuro. Lo que pasó puede ser interpretado con una significación u otra en función de lo que hagas ahora, lo que pasará en el futuro dependerá también de lo que ahora decidas. El acontecimiento, el ahora, es el momento de máxima libertad y creatividad, es un instante en que el significado se proyecta hacia el pasado y el futuro.
Ahora, dime, ¿qué vas a hacer?
¡ Hagas lo que hagas piensa que ha sido, es y será lo que se repetirá eternamente !
¡Decide bien!
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9 comentarios:
Interesante analisis, me identifico con la segunda posibilidad. El pasado ya se escapo, hay que tomarlo como aprendizaje. El futuro, aunque podamos sembrar alguna semillas y abonar la tierra, considero es muy dificil que se pueda predecir con absoluta certeza. El hoy, el ahora es lo único verdadero, muy seguramente fruto del pasado y bases para el futuro.
Lo que no me convence mucho es que podamos repetir eternamente este argumento en nuestras vidas, a veces nos quedamos en el pasado y no aprovechamos el presente maravilloso, o vivimos soñando con un futuro que no lo preparamos desde el ahora.
Monica
mocristy1208@hotmail.com
Muchísimas gracias por tu apunte.
Ciertamente tomar toda decisión bajo un imperativo circunscrito a la lógica del eterno retorno es imposible pero sí, como mínimo, puede servirnos para las decisiones realmente importantes.
Desde esta concepción del eterno retorno el pasado no aparece con un significado acabado sino que, por el contrario, las decisiones tomadas en el presente modifican también el significado de lo ya ocurrido. El eterno retorno hace del presente una fuente de significado hacia adelante y hacia atrás, hacia el futuro y hacia el pasado.
Saludos !
Yo también me animo con la segunda visión, la de Crisipo.
La primera visión, la pesimista, nos dice que no tenemos ningún grado de libertad ni de decisión, todo está prefijado por un destino ya escrito e inviolable.
En cambio Crisipo nos dice todo lo contrario: lo que hagamos, lo que decidamos ahora, será lo que se repita eternamente (y se haya repetido ya). Nos da el don de la responsabilidad personal en nuestras decisiones.
Sin entrar en si hay un destino escatológico o no, o si hay libertad o no, no comparto que pensar en un destino prefijado limite, de suyo, la libertad en términos absolutos.
El cristianismo, sin ir más lejos, ha intentado ligar siempre la idea de un destino prefijado y providente, con el libre albedrío. Yo creo que es posible pensar un margen de libertad, de maniobra de nuestra práctica diaria, aún sabiendo qué destino nos espera. Por ejemplo, todos sabemos que nos aguarda la muerte en el futuro y a nadie se le ocurre pensar que no sea posible vivir de distintas maneras hasta que llegue ese día.
A riesgo de hablar de metafísica y no de conducta moral, me gustaría añadir otro modelo de múltiples universos...
El que aquí se describe es un ciclo infinito de universos en el TIEMPO. Esto introduce un nuevo concepto de TIEMPO, uno que no depende de ninguna flecha termodinámica, sino más bien, un concepto borroso y difuminado que interactúa con todo, semejante al modelo actual de átomo en la Teoría Cuántica.
Si nos planteamos la posibilidad de múltiples universos en el ESPACIO nos acercamos a las teorías modernas de los MULTIVERSOS.
La más sencilla es la de Multiversos de nivel 1:
Según las observaciones, la materia parece estar distribuida uniformemente y teniendo en cuenta el número de partículas de las que está formado un ente, pongamos como nosotros mismos, mediante el cálculo de probabilidades, podría existir una copia exacta de nosotros a una distancia de 1x10^25 Km.
Según esta teoría, vivimos en un Universo limitado por el Volumen de Hubble, es decir, una metaesfera en expansión que nos impide ver a las demás metaesferas o Universos. Estos otros Universos pudieron tener unas condiciones iniciales diferentes del nuestro pero básicamente son iguales en funcionamiento (mismas leyes físicas)...
El Multiverso de nivel 2 se origina al intentar explicar la interpretación probabilística actual de la Mecánica Cuántica.
La evolución de todo sistema cuántico puede colapsar (al ser obervado) en uno de entre varios resultados posibles. Este suceso no es causal y los resultados son estadísticos. Un modo de recuperar la Causalidad en la Teoría Cuántica es el de aceptar la existencia de Múltiples Universos paralelos, de modo que, en cada uno de ellos, el resultado de la medida es sólo uno según leyes deterministas. Nuestra percepción de la Realidad sería pues una suma constante del resultado de todas las medidas en los Universos paralelos actuando simultáneamente, lo que nos daría la apariencia de azar...
Una última reflexión sobre el TIEMPO.
Estamos manejando 2 formas de entender el tiempo: en una, el Tiempo no es lineal y no está relacionado con una secuencia causal de acontecimientos (Eterno retorno de Crisipo). En otra, el tiempo sigue una secuencia causal, dentro de nuestra existencia, de modo que podemos tomar decisiones. En mi opinión, el concepto de DECISION MORAL está unido a una filosofía Realista de la Naturaleza, en la que existen causas que explican los fenómenos. De cualquier otro modo, toda DECISION es un absurdo o una ilusión.
Hola Ender,
Yo diría, en todo caso, que la idea de flecha introduce una determinación más en el concepto de tiempo, por eso, hablamos de "flecha del tiempo". Esta nueva determinación consiste en decir algo más acerca del tiempo, a saber, que tiene un sentido o, dicho de otra manera, que posee cierto orden. Ciertamente, por el contrario, con Crisipo el futuro y el pasado se tocan en los momentos en que todo se encuentra consumido por el fuego, en el momento ígneo el futuro y el pasado son una misma cosa luego se pierde el orden.
Estrictamente hablar de más de un Uni-verso es contradictorio, Universo sólo hay uno por definición, normalmente se emplea el término mundos para referirse a eso que tú llamas MULTIVERSOS. De todas formas entiendo a qué te refieres.
En relación a los multiversos de nivel 2 planteas el típico problema de si el azar no es más que ignorancia respecto a las causas. Así lo que aparece como azar desde la perspectiva de nuestro mundo a la luz de las determinaciones de los múltiples mundos (ignorados) no es más que causalidad. Yo por lo general prefiero el punto de vista de la necesidad porque lleva ímplicito una búsqueda de las causas, dicho de otra manera lleva implícito cierto empuje a indagar y renovar tus aparatos conceptuales, mientras que la contingencia, por el contrario, parece arrastrarte a una concepción de la realidad como algo arbitráreo y de lo arbitráreo difícilmente puede haber conocimiento.
Lo último que afirmas en relación a cuando tienen o no sentido las decisiones morales me plantea serias dudas y pienso justo al contrario de ti. En un universo completamente determinista las decisiones morales carecen de sentido puesto que no hay más que apariencia de toma de decisiones, apariencia de libertad. Cuando gobierna la necesidad la moral aparece como engaño, como ilusión, como ideología. En cambio, cuando no hay sentido predeterminado alguno y se escoje cierto sentido, valor, etc. sin poder apoyarte en "esencias algunas situadas en el cielo inteligible o en la inmanecia de lo natural" (realismo) la decisión moral supone una gran carga, queda como una pesada losa sobre las espaldas del sujeto moral.
Parece pues que, bajo mi punto de vista, ciencia y moral están condenadas a no llevarse demasiado bien.
Hola Edmundo V...
Entiendo tu postura sobre el tema de la realidad y la decisión. No obstante veo una paradoja en toda esta cuestión.
Si el Universo es determinista, nuestras decisiones también están determinadas (según el principio de causalidad). En esto estoy de acuerdo. Ahora bien, si el Universo no es determinista, no tendría sentido tomar una decisión ya que no podríamos esperar que el resultado de la misma desencadenase necsariamente el efecto deseado (no hay principio de causalidad). Por lo tanto la DECISIÓN como tal, no existe.
Por reducción al absurdo, nos encontramos pues con la conclusión de que una de las dos hipótesis siguientes es necesariamente falsa o inexistente:
1) El Principio de Causalidad
2) La toma de decisiones
O lo que es lo mismo, no pueden darse ambas simultáneamente!...
Saludos.
La toma de una decisión en un mundo regido por el azar implicaría un "apostar por", un poner el "valor en", etc. Por tanto, lo moral circunscrito a un ámbito dominado por lo aleatorio tendría que ver más con la intención que con las consecuencias de la decisión.
En mi opinión, como me inclino a pensar -igual que Maquiavelo- que en el ámbito histórico similares causas dan lugar a similares efectos, lo moral tiene que ver más con las consecuencias de los actos que con la intención con que se realizan.
Ahora me dirás: ¡no hay decisión posible en un mundo causalmente determinado! Si hablamos de un mundo determinista absolutamente estamos de acuerdo en que carece de sentido hablar de moral en general pero si, por un lado, admitimos que la necesidad juega un papel muy importante pero que, por otro lado, hay cierto grado de autonomía relativa y limitada a los condicionantes históricos entonces sí tiene sentido, aunque sólo sea un sentido relativo, esto es, hablar de moral sin incurrir en la moralina.
Saludos !
Muy interesante. Sigo reflexionando...:-)
¿Qué es la Necesidad?¿Y a qué se debe ese grado de autonomía?
No entiendo cómo aplicar esos conceptos a la vida real.
¿Son conceptos sólo aplicables al ámbito de la mente humana o también al mundo físico?
Es decir, si una causa implica un efecto en el ámbito del mundo físico, ¿qué papel juega aquí la Necesidad? ¿Es necesario que las cargas opuestas se atraigan? ¿Debemos renunciar a la Causalidad y sustituirla por Necesidad? ¿No es sólo un intento de explicar que tenemos capacidad de decisión pero que a la vez la Necesidad nos asegura que las cosas sucederán de un cierto modo determinista aunque no lo suficiente para que podamos sentirnos libres?
¿No es todo esto un juego mental desde el punto de vista lógico?
Saludos!
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